Hidalgo del Parral, Chih.— La extrabajadora de la Dirección de Servicios Públicos Municipales, Esly Vences Gurrola, denunció públicamente haber sido víctima de un despido arbitrario, acoso laboral, hostigamiento sexual y presuntas represalias políticas por parte de funcionarios del municipio de Hidalgo del Parral.
En una declaración difundida a medios de comunicación y organismos de derechos humanos, Vences señaló que fue despedida de manera verbal y sin justificación oficial el pasado 6 de junio por el oficial mayor del municipio, identificado como el C. Ing. Flores. Según relata, este funcionario la confrontó con un tono hostil, le gritó que estaba fuera “sin motivo alguno” y le arrebató violentamente su teléfono celular, el cual era de propiedad privada.
De acuerdo con la denunciante, el despido habría sido ordenado días antes, el 2 de junio —día de la jornada electoral—, durante una reunión sostenida en el restaurante “El Zaguán”, propiedad del alcalde Salvador Calderón Aguirre. Ahí, presuntamente se instruyó a su superior inmediato, el director Eduardo Valdez Méndez, para que la diera de baja debido a que no votó conforme se le había indicado en un “acordeón” previamente distribuido.
“Este tipo de exigencias y represalias políticas vulneran mis derechos constitucionales”, expresó Vences, quien citó diversos artículos de la Constitución que protegen la libertad del sufragio y los derechos laborales.
Además, denunció haber sido víctima de hostigamiento sexual durante su tiempo en el cargo por parte de funcionarios adscritos a áreas superiores del gobierno municipal. Asegura que su negativa a responder a insinuaciones derivó en una campaña de desprestigio y hostilidad en su contra. Señaló que está considerando acudir ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y el Instituto Chihuahuense de las Mujeres por violencia institucional y de género.
Por último, desmintió versiones que han comenzado a circular tras su salida, en las que se le acusa de haber borrado información de una computadora institucional. Aclaró que desde su ingreso, el 11 de septiembre de 2024, trabajó con equipo personal, ya que el dispositivo oficial que se le asignó ya se encontraba vacío.
“He decidido hacer pública esta situación no solo para defender mi integridad, sino para denunciar un patrón de irregularidades y abusos que deben ser investigados por las autoridades competentes”, concluyó.
Hasta el momento, la administración municipal no ha emitido un posicionamiento oficial al respecto.
A continuación reproducimos íntegramente su posicionamiento:
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