Luego de la controversia generada por la actualización de las tablas catastrales, el alcalde Salvador Calderón expresó su pesar ante la polémica suscitada, señalando que, a pesar del incremento autorizado, los valores de las tablas aún están un 90% por debajo del valor real.
Calderón reconoció que cualquier aumento en impuestos puede generar diversas opiniones, aunque su principal objetivo es ajustar los costos para lograr una regulación adecuada. Subrayó que ningún gobierno puede operar sin recaudación y aseguró a la ciudadanía que cada peso recaudado será invertido de forma transparente y en beneficio de la comunidad.
“Son temas que despiertan diferentes posturas, pero nos corresponde actualizar las tablas para normalizar estos valores”, añadió.
El alcalde destacó además que el artículo 21 indica que el valor de las tablas debería ser incluso mayor al aprobado en cabildo, ya que la actualización mantiene los valores un 90% por debajo de los actuales en la ciudad, calificando el ajuste como “mínimo”.
A pesar de que se trata de un incremento bajo, Calderón aseguró que hubo un proceso de trabajo y acuerdo previo. Reiteró que el objetivo no es dividir opiniones, sino lograr mayor equidad en los valores catastrales, especialmente en zonas periféricas que actualmente pagan por metro cuadrado como si fueran áreas residenciales.
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