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Punto y aparte VIII

La columna que la mafia del poder no quiere que leas

Semana de definiciones en la localidad. Hoy se registra Chava con su equipo priísta conformado por Memo Ramírez y Dalila Villalobos.

Parece que por fin aplacaron a un Trini Salvaje que aparece cada tres años para inconformarse contra quien sea candidato, en busca de obtener un huesito de consolación.

Con eso, queda el camino libre para que el candidato del PRIAN comience la operación cicatriz y detenga la desbandada de tibios que ya coqueteaban con Morena y MC.

Se espera que también en estos días, Vanessa Terrazas se inscriba para la diputación por el XXI, pero ahí es un tema delicado para los de la 4T, pues Otto Valles, fiel a su estilo de apostar a favor y en contra, impulsó una candidata instagramer por medio del PT, en lugar de buscar la unidad de la alianza izquierdista.

Va a ser curioso -más no nuevo- ver a dos personas que contienden por el mismo puesto, de la misma alianza, pero con colores divididos.

Este jueves Sol Sánchez hará lo propio, junto con el secreto mejor guardado en las oficinas de Altavista, la candidatura a la diputación local.

Mientras que en el ámbito nacional hay dos candidatas y un hombre de MC, en el plano local serán dos candidatos y una mujer por MC.

La ventaja de Sol no solo es la estructura territorial, sino que ella sabe mover astutamente sus piezas sobre el tablero, y prefiere jugar el rol de mujer de acción y no de discurso.

Un claro ejemplo lo veremos en la Zapata, donde la gente espera con ansias el recorrido de Chava para recordarle la casa que tanto presumió que construiría para una damnificada, pero que finalmente terminó edificando Sol. Ese tipo de promesas vacías ya no las tolera la gente, quizás en tiempos del PRI sí, pero hoy ya no más.

Pero, mientras que Sol tiene el respaldo de la gente de las colonias, Chava goza aparentemente del respaldo de lideres religiosos y empresarios, esos “pobrecillos” a los que les echaba una “ayudadita” con fondos de FECHAC.

Por su parte, Otto cuenta con el respaldo de las tarjetas del bienestar, el éxodo de los tibios y despechados, además de los diez mil fokemones y cocodrilos, traídos directamente del pantano de Miguel Jurado, aquel que le prometió a Chava y Amin, un pacto de unidad que duró menos que el pavimento del periférico.

Por alguna extraña razón, no se vieron muchos simpatizantes en el registro de Valles, pues aún con acarreados no juntó ni doscientas personas. Quizás se quedaron dormidas, haciendo fila en el Banco del Bienestar o esperando el pago que Jurado les quedó a deber en el 2021.

La del estribo.

Por lo pronto, las campañas de senadores y diputados continúan a lo largo y ancho del estado, y las cuales las podríamos resumir con las siguientes palabras: “ “.